En los sistemas tradicionales o, incluso, en los virtualizados con VMWare en nuestro datacenter, teníamos la posibilidad de entrar en la consola de administración y arrancar con una ISO de rescate en caso de que algo saliese mal durante una actualización (un kernel panic, por ejemplo).
En Amazon AWS no tenemos acceso a la consola, así que antes de realizar cualquier cambio que pudiese ocasionar una incidencia, es muy recomendable hacer una copia de seguridad de la maquina virtual.
Los pasos que yo sigo son:
- Apago el servidor virtual.
- Creo un snapshot del disco de sistema.
- Si tuviese algún problema, podría restaurar la copia de seguridad.
- Apago el servidor para asegurarme de que el snapshot no está corrupto.
- Actualizo el sistema.
Mejor os dejo un vídeo con las acciones comentadas:
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